Texto de presentación y lanzamiento de la fiera de editoriales y propaganda anarquista de Roma, 4-5-6- de abril 2025
Es en el contexto de un tejido social que nos cuesta reconocer como interlocutor, “neutralizado” de aquellos aparatos del dominio ocupados en distorsionar su imagen con el fin de justificar la carrera armamentista y los logros de la soberanía tecnológica, es que intentamos reconocernos como elementos de subversión anarquista.
Intentamos comprender y disipar aquellos lanzamientos masivos de humo en los ojos de quien, entorno a nosotrxs, se conforman con los cánones narrativos de la sociedad política, acercándose cada vez más prepotente a una visión de su identidad basada en retóricas reaccionarias y soberanistas. Desenfrenado es el sentimiento de emergencia en el cual se fundan los movimientos de gobiernos que, instrumentalizando fenómenos de inseguridad generalizada, de una “deriva criminal” de la marginalidad social, crea las bases de una disidencia que gira en torno a una inconcebible y total estructura en los enfrentamientos con aquellos estados que, silenciosamente desempolvan los vestidos de un imperialismo colonial-extractivista, que se exhiben hasta ahora en corales camuflados de “voluntad” direccionada a una ilusión de bienestar colectivo.
A oídos atentos llega la inquietante disonancia de una exhibición que tambalea de un frente atlantista que continua su obra de adormentar con fábulas de no-violencia mientras arma el sentido del conflicto ucraniano y sostiene el genocidio del pueblo palestino; de una fortaleza europea que cimenta una alternancia de rostros humanos y caritativos (bastión de un modelo democrático ya obsoleto) y una postura muscular y compacta, lista a cada eventualidad de frente a un identificado enemigo externo. El implemento de la maquina represiva que ha rociado delitos asociativos en los últimos años y que hoy se redescubre concentrada en “delitos de tinta” y proporcionales al nivel de credibilidad que el aparato estatal puede permitirse perder en un momento histórico como este.
Nos encontramos, por ejemplo, en un estado italiano que apunta, como en el caso de traslado de Alfredo al 41BIS, a la supresión de una propaganda que da luz a las propias acciones, silenciando y rindiendo inofensivos lxs “alborotadorxs del lápiz” desviadxs ,“impulsores de masas” provenientes del movimiento anárquico… movimiento que, se pondrá de acuerdo, encuentra actualmente difícil persuadir incluso a sí mismo, lo que nos induce a reflexionar sobre las motivaciones de nuestra actual ineficacia y sobre nuestras grandes contradicciones.
El engrosamiento de las filas de un ejército por parte de presuntxs anarquistas, la brecha establecida a partir de las respuestas dadas del experimento de control totalitario llamado pandemia y el intemporal oscurantismo reaccionario de la corriente antifeminista (cubierta queer-transfóbica acompañada de la, más que nunca necesaria, critica anti tecnológica) son solo algunas de aquellas antinomias que nos advierten en el acta que en este estanque fangoso no hay oxígeno para todxs.
No hay ni puede haber, ningún impuesto de comunión que no nos halle sometidxs a una tensión reprimida, desmantelada de su éxtasis destructivo o mutilada de la gloria de la complicidad. El porqué de nuestra ineficacia en este presente, donde el mundo asume las semblanzas tanto reales (y cuanto menos escuchadas) del enfermo tecno-militar-capitalista, son de búsquedas también en esto y, sobre todo, difiriendo la mirada a nuestro interno, a nuestras contradicciones, a nuestro sentir como movimiento revolucionario y a nuestro preguntarse para quién, hoy, escuchar el llamado a la acción. ¿Para nosotrxs mismds en primera instancia? ¿Para quién sentimos cerca como compañerxs? ¿Para quién reconocemos como oprimidxs? ¿Solo por el amor de nuestro mundo de rabia que encuentra afinidades que convergen en el ataque de esta sociedad?
Es para compartir las respuestas a estas preguntas, para consolidar, crear y redescubrir los senderos de la afinidad que se hacen percibir como conscientemente unidxs (o voluntariamente divididxs), que pensamos importante una feria de editoriales. Sin discusiones y debates sobre lo que son nuestras ideas, nuestra historia y nuestros sueños nos arriesgamos a convertirnos en sólo otra porción del mundo antagonista: Un libro, un debate y un lenguaje que, a través de nuestra difusión, se hace colectivo favoreciendo la conspiración. Es hoy, más que nunca, la necesidad de destruir el devenir que se viene proyectando para acelerar la eclosión de la acción de aquella crisálida que llamamos palabra.
Aquello a que apuntamos es un momento de encuentro entre compañerxs de diversos contextos, que intenta romper los confines (también aquellos culturales y lingüísticos) y, que apunte hacia un crecimiento cualitativo en el intercambio de análisis y experiencias que traspasan nuestros horizontes territoriales. Aportando así, potencialidad de nuestras intervenciones, en una óptica de una concreta proyectualidad que no conozca fronteras.
Un encuentro que esperamos pueda también, romper con las categorías sobre la cual se basa esta sociedad. Rechazando los especialismos, la sutil forma de autoridad y la división de tareas que observamos con frecuencia transmutarse en delegar, buscamos crear momentos de discusión que abandonen lo más posible la dinámica frontal de la presentación, construyendo debates de más voces, circulares, que se contaminen recíprocamente en el agrazo de perspectiva de tinta y llamas.
¡Tejamos las redes de la complicidad para volver a trazar los senderos de la voluntad liberadora tras las sombrías tintas de lo existente!